Tapetes oficiales de "Wings of War"

A la hora de jugar nuestras partidas de Wings of War uno puede hacerlo donde quiera, cualquier superficie plana es susceptible de convertirse en nuestro espacio aéreo particular. Las mesas amplias y rectangulares sueles ser la mejor opción. Pero hay quien prefiere tapetes a la hora de jugar por aquello de simular mejor las batallas y aparentar estar sobrevolando zonas rurales. Por esto es habitual emplear los tapetes de juegos de miniaturas al uso, como los de Citadel. Yo empecé jugando, y a veces sigo haciéndolo, empleando tapetes Citadel. No obstante hoy no voy a dedicarme a hablar de los posibles tapetes de juego de los que podamos echar mano para nuestras partidas así como de los de fabricación casera tirando de imprentas. Hoy toca hacerlo de los dos tapetes oficiales que Nexus tiene en el mercado para su Wings of War.

(Hacer clic en las imágenes para ampliarlas)

Cada tapete oficial tiene unas dimensiones de 68 x 98 centímetros. Muestra territorio rural desde el aire con edificios de tejados rojos, carreteras y caminos secundarios, zonas boscosas, un río con el puente destruido por bombardeo, líneas de trincheras y zonas de cultivos.Debido a la prisa por hacer las fotos, pasarlas al PC, colgarlas y crear la entrada, he tirado de montarlo todo en el suelo de una habitación de casa. No queda tan vistoso como fotografiado en mesa pero voy con el tiempo justo y creo que este modo empleado no perjudica en nada a las imágenes ni el valor de la información que se le da a lectores interesados en adquirir uno o ambos tapetes oficiales.

La imagen mostrada es la de un único tapete, en el que he colocado seis aparatos por bando: los tres SE.5a y los tres Albatros D.Va en un enfrentamiento típico para ambos tipos de aviones durante la guerra. Como puede comprobarse, un único tapete ya nos otorga espacio suficiente de juego para varios aviones por bando. He puesto seis pero podría haber colocado más sin perjuicio del espacio. Evidentemente, a mayor número de aparatos en la partida mayor necesidad de espacio pues de lo contrario el porcentaje de posibles salidas de los límites del tapete por parte de algunos aviones aumenta. 

Los tapetes son de calidad, realizados en goma, con la superficie de juego perfectamente lavable con paño húmedo y la base con la adherencia necesaria para que no se nos mueva durante el trajín de nuestras peleas de perros. He creído conveniente incluir esa imagen con una de las esquinas vueltas para que se pueda apreciar ambos tipos de superficie en el tapete.

Cada tapete nos llega en una caja de cartón con forma de prisma triangular. Dentro, cada tapete debidamente enrollado y metido en una bolsa de plástico. Desde ya recomiendo a toda aquella persona que compre tapetes oficiales que, perogrullada pero no está de más decirlo, abra las bolsas de plástico por un extremo con cuidado y las guarde para proteger los tapetes dentro de sus respectivas cajas. No sea que con las ansias típicas del desempaquetado rasguemos las bolsas y eso nos impida usarlas en el futuro.

En esta otra imagen he colocado los dos tapetes uno junto al otro para una superficie total de 98 x 136 centímetros. El diseño nos establece por defecto el modo en que debemos hacerlo, ya que tanto el curso del río como carreteras y cultivos continúan de un tapete al otro en una única forma. No obstante, si para alguna partida necesitásemos alterar ese orden colocando los tapetes uno sobre el otro para un ancho de 68 centímetros y un alto de 196 centímetros nada nos impide hacerlo. La cosa es tener una base de juego que nos procure ambientación, pero no debemos nosotros ajustarnos a los elementos de juego sino adaptar estos a nuestros intereses. Dejando los mismos seis aviones en escena, evidentemente el espacio es mucho mayor y permite una más amplia libertad de maniobra con los aparatos. De todos modos al final, una vez se encuentran las formaciones enemigas, tengamos el tapete que tengamos, sea uno solo o los dos, los combates acaban formando melés.

No estamos hablando de un producto barato ni necesariamente obligatorio el poseerlo para jugar a Wings of War. Pero es cierto que se trata de una muy buena compra que otorga a nuestras partidas un espacio de juego con ese toque de ambientación y "realismo" que mejora sensiblemente el juego y que entra por los ojos. Aunque prescindibles de derecho, de facto los tapetes acaban convirtiéndose en un elemento de juego no solo apetecible sino importante por lo que aporta a las partidas y porque es una lástima contar con miniaturas pintadas y el colorido de las cartas para luego disputar las batallas aéreas encima de una mesa sin base alguna decorativa. Al final, como todo en esta vida, cada cual puede jugar como quiera y con los elementos de juego que desee.